plegaria del erotismo
dulce cuerpo
vengan a ti todas las pasiones
de la carne y de la sangre
que las costras dormidas se abran
y sea en ti
herida viva
que palpita y estremece
dulce cuerpo
que se confundan en ti
todas las huellas de medianoche
todas las manos
que los mil dedos anhelantes
entibien muslos y caderas
que la boca de mi amada
comulgue la ostia de mi semen
y sea eternamente su alimento en la memoria
yo te lo pido señor
dame hoy lucidez no inteligencia
para alcanzar la plenitud
el goce en los orgasmos
y en un largo beso
se confunda mi saliva en la otra boca
permite que mi lengua
hable hoy el lenguaje del amor
cuando recorra el cuello de mi amada
la espalda y su cintura
que esta noche entrelazados
pronuncie la única palabra entre gemidos
amén