dos y media de la madrugada
hay una hora en la noche cuando todas las puertas se cierran
entonces todo se hace una densa negrura
no está tu voz
ni tu rostro de nácar para darme la bendición
madre
atrás quedaron las risas entre tristes despedidas
verte partir
cansada de lidiar con esta vida
atrás quedaron los tiempos cuando me lavabas las manos
de la inocencia
untabas mi pecho en rosados e intensos olores
era tu calor debajo de tu brazo alado
donde ocultaba mis miedos
mi asma
madre
atrás duerme la ilusión de vivir
delante queda este trecho cercano
vecino
el paso siguiente a mi destino
esta madrugada
tu voz detiene mi decisión de partir
I
no es el amor lo que sostiene hoy mi vida
este tedio húmedo y silencioso
esta cotidiana manera de existir
más allá de lo imposible
VI
sólo la demencia
-memoria solitaria
colma el desvelo de este amanecer
VIII
donde voy es un lugar
sin regreso posible
todo regreso supone otra vida
estoy cansado de vagar
X
he andado y desandado
inútilmente
he pronunciado tu álmico nombre
en esta vida en este instante
sólo el silencio te nombra
Todo el que es buen hijo, es buen esposo, padre y amante...T.A.
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